El maestro Cristiano

Efesios 4:11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros,

El maestro cristiano es aquel que Dios ha puesto para que la congregación, entienda, comprenda y pueda asimilar mejor la palabra de Dios.

Muchas veces la persona que llega por primera ves a la Iglesia no entiende del todo el mensaje que el pastor esta predicando, hay otros hermanos que se les dificulta entender palabras de la Biblia, y hay quienes quieren conocer mejor la palabra de Dios.

Por lo que el maestro siempre tiene que estar buscando el rostro de Dios, preparándose cada día para que la enseñanza que imparte pueda ser de bendición y el pueblo de Dios pueda conocer mejor su palabra.

Oseas 4:6b
Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.

Muchas veces nos perdemos muchas bendiciones por que nos falta conocimiento, por no conocer mas lo que Dios nos ha dejado en sus dos testamentos.

El trabajo del maestro es que los hermanos puedan conocer mejor la palabra de Dios y puedan usarla durante su vida espiritual.

A continuación se mencionan algunos puntos que deben ser considerados por el maestro cristiano.

A) La función del maestro

1.- El maestro es líder y guía en su clase
No es un dictador que impone solo sus ideas, sino que trabaja con la clase para lograr propósitos bien definidos, tales como, conocimientos bíblicos, encuentros personales con Cristo, esfuerzo hacia el crecimiento cristiano.

2.- Es un alumno también
El maestro mismo debe estudiar constantemente en oración, procurando entender la enseñanza que va a compartir, y tratando de entender el mensaje de Dios en cada enseñanza.

3. Es un cristiano en desarrollo
Tiene la actitud del apóstol Pablo al decir: "No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto, sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús." Filipenses 3:12. El maestro tiene que ser lo suficientemente humilde como para reconocer que no lo sabe todo, y que el decir “no lo se” también es una respuesta.

B) La personalidad del maestro

1. Los factores de la personalidad del maestro

a) Físicos: El buen maestro se empeñara por tener buena presentación, tener hasta lo posible buena salud, estar descansado, tener energía, usar una voz agradable ante la clase.
 
b) Mentales: El buen maestro tendrá interés constante en mejorar sus conocimientos, en saber los acontecimientos en el mundo actual y la situación de sus alumnos, procurará pensar lógicamente y juzgar bien, sin prejuicios, podrá decidir, siempre mirará hacia el futuro, haciendo planes, proyectando actividades.
 
c) Sociales: El buen maestro será optimista, será paciente y tolerante, será entusiasta, más que todo será sincero y digno de confianza.
 
d) Moral: El buen maestro tendrá una vida moral intachable, lo que predica y lo que vive tiene que ir de la mano, tratara de no verse envuelto en chismes o situaciones que puedan ser piedra de tropiezo para otros hermanos.
 
e) Espirituales: El buen maestro habrá hecho una entrega completa de su corazón y vida de Dios, y tendrá el concepto de que su trabajo como maestro es una misión divina. Tendrá una comprensión de la realidad, presencia y guía de Dios en su vida diaria. Estará convencido de que Cristo es la única esperanza de la humanidad y deseoso de que otros encuentren el camino de salvación. Amará a Dios y amará a sus alumnos. Orará sin cesar. Tendrá disposición de trabajar, de dar de su tiempo y esfuerzos, sin esperar recompensa sin reconocimientos. Tendrá convicciones bíblicas y doctrinales firmes. Se esforzará constantemente como cristiano.
 
C. El maestro como estudiante de la Biblia:

1. La Biblia: su fuente
La Biblia, es la fuente del maestro cristiano, la base de todo lo que enseña, es la única fuente fidedigna de la palabra de Dios, puede tomar otros libros como referencia para poder ayudarle en su entendimiento de la enseñanza, como Diccionarios bíblicos, comentarios bíblicos y algunos libros que hablen sobre el tema.

La Biblia no solo debe ser la fuente del maestro, sino que procurará que sus alumnos la amen y la usen. Y hará lo posible por poner en práctica sus enseñanzas.
  
C. Estudio especial, con el fin de preparar a fondo una lección particular:

1. Estudiar la lección diariamente, empezando por lo menos una semana antes de enseñar, leyendo la lección completa una y otra vez, estudiando también citas bíblicas afines.
 
2. Estudiar la lección, buscando ilustraciones, anécdotas, ayudas visuales que vienen al caso, y de los materiales encontrados se escoge lo que se usará en la hora de clase.
 
4. Meditar y orar, durante toda la semana, pidiendo de Dios dirección y poder espiritual al enseñar.

angelvl31@yahoo.com.mx